La joven estudiante de la carrera de Kinesiología de la Universidad Autónoma de Temuco, instaló en su hogar una pyme, la cual ofrece a la comunidad de Labranza masajes accesibles para alivianar los dolores musculares y también para que tengan un espacio de relajación.
“Masajes Labranza”, es un espacio creado por Jeannette Candía Anguita, quien se encuentra cursando su último año de la carrera de Kinesiología en la Universidad Autónoma de Temuco. El objetivo principal de su emprendimiento es buscar promover el bienestar físico y mental, calmar dolores, liberar diversas tensiones y, sobre todo, ayudar en la disminución del estrés en las personas.
Tipos de masajes
Su emprendimiento tiene un año y ella comenta entre risas que a los primeros que atendió fue a su familia y era para tener confianza y seguridad al momento de identificar los dolores. Por lo que cuando llegó a su centro su primer paciente, sin duda pudo estar a la altura de la misión.
En su pyme, Jeannette cuenta con cuatro tipos de masajes, los cuales son los relajantes, luego están los descontracturantes, los deportivos y por último los mixtos. Recalca que el tipo de terapia que se escoja en la sesión será en base a las dolencias de los usuarios, por lo que antes de comenzar, ella les hace preguntas para identificar el dolor: “Siempre les pregunto a los usuarios ‘dónde les duele, por qué les duele, desde hace cuánto les duele y si hay algo que comenzó este dolor’, porque así uno aprende a diferenciar y aprende a enfocar el masaje que tú vas a realizar. Pasa mucho que vienen secretarias y yo ya sé dónde les duele, también vienen mucho los que trabajan en construcción y yo ya digo que les duele la espalda baja y así. Una ya los conoce y va descartando según la historia que te vayan contando”, comentó.
En cuanto a los precios, menciona que todos los masajes tienen una duración de una hora, donde los relajantes son los más económico, ya que no se ocupa tanta fuerza, por lo que tiene un valor de 17 mil pesos y el resto de masajes cuestan 20 mil pesos. Al respecto dijo: “Acá ocupamos todas las terapias complementarias, ya sean las pistolas o las ventosas, pero todo depende de la persona. A mí en lo personal me gusta mucho la terapia manual y utilizo la mayoría del tiempo mis manos”.
Recuerda que desde el principio quiso tener esos precios, los cuales considera baratos a comparación de otros centros: “Todas las personas nos acostumbramos a vivir con el dolor y es porque tener una hora con el kinesiólogo sale caro. Entonces desde un principio mi idea con mi emprendimiento fue tener precios accesibles para los trabajadores, para las mamás y todas las personas que no tienen el sustento económico tan alto, puedan venir todos los meses a hacerse un masaje”.
Está ubicada en Labranza, específicamente en Volcán Villarrica #04400 en la villa Conavicoop, donde atiende todos los días: “Yo feliz de que vengan a hacerse masajes conmigo. Acá van a encontrar a una persona buena onda y de confianza donde van a poder preguntar lo que sea y yo siempre les voy a dar mi enfoque de acuerdo a lo que es la kinesiología y también, van a tener a una persona con la que podrán conversar”.
Finalmente, la pueden encontrar en Facebook y en Instagram como Masajes Labranza (@masajeslabranza)y en la descripción de sus redes sociales podrán ver su número de teléfono, para que puedan preguntar por horas disponibles y todas las dudas que tengan sobre su emprendimiento.