Llegó septiembre, mes de la patria, y con ello comienzan a verse en los cielos de todo el país miles de volantines de diferentes diseños y colores, que hacen de esta una tradición que seguirá por siglos.

Cuando hablamos de cosas infaltables en las Fiestas Patrias, elevar volantines es una de ellas. Pues esta tradición que viene desde el siglo XVIII en nuestro país, se ha tomado por completo el mes de septiembre, ya que, desde el primer día se empiezan a divisar en los cielos nacionales diversos volantines.

Pueden ser de papel, plástico, de colores, grandes o pequeños, independiente de cómo lo hagas, la idea es que se robe el protagonismo y que se vuelva una actividad entretenida para disfrutar con toda la familia.  

Para conocer más sobre esta tradición y este importante rubro, conversamos con Javier Valdés Montecinos, un amante de los volantines, ya que desde los 13 años que los fabrica y a raíz de eso, creó su emprendimiento ubicado en Samuel 3351 en la comuna de Maipú llamado “Volantines Valdés”.

Comenta que su amor por los volantines nace por una necesidad que tenían en su casa, ya que no contaban con el dinero suficiente para poder comprar uno y salir a jugar con los demás niños, agregando que: “Es ahí cuando decido comprar los materiales para fabricar y contar con mi propio elemento de juego que son dos maderos y una hoja de papel. Fue tanto el gusto de ver como algo armado por mis propias manos me divirtiera tanto. De hecho, hasta el día de hoy, sigo sintiendo la misma sensación de mirar al cielo y disfrutar del volantín que logré armar en tal tamaño, color y figura”.

Claro está que le tomó mucho tiempo aprender a crear uno, pues estuvo mirando y observando a otros volantineros por videos, pero recalca que aprendió al cien por ciento cuando tuvo la oportunidad de conocer a un artesano de gran trayectoria y pudo adquirir toda la experiencia.  

Javier Valdés Montecinos

Club volantinismo “Poseidón”

Tan grande es el amor por este arte, que Javier creó su tan preciado “Club de Volantinismo Poseidón”, para enseñar y disfrutar de esta increíble tradición que, cada año inunda los cielos nacionales en Fiestas Patrias.

Javier es enfático en recalcar que: “Lo que me motivó a crear un club volantinismo fue tener algo propio con el cual yo pudiera confiar en la gente, que me acompaña y comparte los mismos gustos y que quiere ser parte de una tradición familiar. Eso me motiva día a día a ser una persona responsable de guiar, apoyar y motivar a gente que comparte el mismo gusto que por muy tradicional que sea en nuestro país, el compromiso con ellos es tan grande que a mí me permite crecer como persona, como capitán y como jugador”.

Al club pueden entrar todos aquellos que sepan maniobrar un volantín y si son menores de edad, tienen que ir acompañados de un adulto responsable para que así puedan llevar a cabo las diferentes actividades que el club predispone: “Rango de edad no tenemos. Actualmente contamos con jóvenes desde los 10 años hasta personas ya adultas de 67 años”, subrayó Valdés. 

Septiembre, mes del volantín

Este mes de la patria, es donde más volantines se venden, ya que como se mencionó anteriormente, es una tradición que viene de generaciones. Por lo mismo, esta época del año, es donde más demanda tiene el emprendimiento de Javier, donde recalcó que ha llegado a vender 10 mil volantines y 5 mil pavos aproximadamente por temporadas.

Él vende por unidad y por mayor, ya sea en Santiago o a regiones a través de Starken, donde no solo venden volantines, sino que sus accesorios, agregando que “vendo medios pavos, hilos de competencia bajo la ley 20.700, carretes, cinta para los dedos, carretillas de hilo sano y todo lo necesario para encumbrar volantines”.

Precauciones para tener una buena experiencia con los volantines

Valdés recomienda que para que un volantín sea de excelente calidad, siempre “deben fijarse en que tenga sus maderos bien pegados y que este esté pegado sobre el dobladillo del papel, que tenga una buena tensión y no esté como flácido y que al momento de elevarlo que se sienta el peso y tensión del volantín en el aire”.

Agregando que una de las precauciones más importante es no usar “hilos curados”, tener cuidado con el tendido eléctrico, los cables energizados que están en todas las calles, no treparse en los árboles o postes eléctricos para recuperar un volantín. Además, añade que “no hay que dejar los hilos cortados en las calles y el hilo colgado. Si se ve eso, favor retirémoslo”, mencionó.

Por otra parte, Javier ha sido muy claro cuáles son sus metas a futuro, las cuales son tener un taller más grande, que abarque mayor cantidad de productos. Poder contar con un taller de fabricación y venta de accesorios para volantines y que todo aquel que vaya, se sienta cómodo con el espacio y la decoración.

Finalmente, si deseas comprar sus productos para disfrutar de Fiestas Patrias, puedes seguirlo en Instagram como “Volantines.Valdés” o por WhatsApp al +56992789542.

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