Jessy Molina Gutiérrez, Chocolate Amargo:
Este fin de semana, la emprendedora celebra su décimo “Mercadito Navideño”, con que invita a compartir productos 100% hechos a mano, el que ha sido su lema por más de 13 años en el mundo de la alta costura.
En un lugar destacado de la tienda “Chocolate Amargo”, ubicada en Hochstetter #90, Temuco, Jessy Molina exhibe una antigua máquina de coser Singer heredada de su abuela, una inspiración que le recuerda su gusto por la moda desde que era una niña.
“Desde niña recuerdo jugar con ropa, diseñar vestidos, por eso estudié diseño de producto y luego me especialicé en alta costura, también me gustaba el arte y la arquitectura, pero mi madre me apoyó en seguir la carrera de diseño”, señala.
Ya titulada, nunca trabajo de manera permanente para otras personas o empresas, porque tenía clara sus ideas, su independencia y lo que quería lograr como empresaria. Primero fueron accesorios urbanos y luego comenzó a experimentar con vestuario que compartía con amigas.
“Luego empecé a tener varios pedidos de vestidos de novia, pero no me atrevía a hacerlos, encontraba que era mucha responsabilidad, pero la demanda fue tal, que me decidí y comencé a diseñar y fabricar vestidos de novia, lo que hoy, junto a los vestidos de fiesta, constituyen mi principal ocupación”, agrega Jessy Molina.
¿”Chocolate Amargo”?
El origen del nombre se debe a una búsqueda realizada por Jessy para crear su marca. “Buscaba un nombre compuesto, original, que fuera recordado por las personas. La otra alternativa era “Agua de Menta”, recuerda riendo.
Al preguntarle por su estilo, Jessy señala que sus vestidos tienen un aire relajado, cómodo, juvenil, no grandes ni aparatosos, explicando que tras el diseño de cada vestido existe un trabajo casi psicológico, donde además del calce perfecto se busca la coincidencia con la personalidad de quien lo va a lucir.
Aunque durante la pandemia existió un bajón importante en la venta de sus vestidos y accesorios, Jessy asegura que hoy ya se ha vuelto a la normalidad, y trabaja a tiempo completo junto a un equipo de ocho personas a cargo de diversas áreas.
“Hoy tenemos una alta demanda de productos, especialmente vestidos de novia y de fiesta, que destacan por su exclusividad y por su calce perfecto de acuerdo con la contextura de cada persona, algo casi imposible de encontrar en las tiendas del retail”, asegura.
Mercadito Navideño
Este año, Jessy Molina celebra la 10ª versión de su “Mercadito Navideño”, un evento donde invita a emprendedores de la región para compartir un espacio de comercialización durante tres días (9, 10 y 11 de noviembre) junto a su local, en Hochstetter 90.
“Durante la pandemia hicimos un Mercadito online, y este año es el segundo que hacemos postpandemia, pero el primero sin mascarilla, por lo que esperamos una alta afluencia para reencontrarnos y compartir nuestros productos con la comunidad”, agregó.
“Este año contaremos con 25 expositores de La Araucanía, con la única exigencia de que sean productos fabricados a mano por quienes los venden, no es la idea venir a revender productos”, indicó Jessy, invitando a la comunidad temuquense a visitar el mercadito este fin de semana, donde encontrarán moda, accesorios, artesanía e incluso este año gastronomía y cerveza artesanal.
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